MaykaMerienda(LLLL)
sábado, 18 de diciembre de 2010
Psche
Me siento solo. MUY solo.
¿En quien puedo confiar? ¿A quien puedo acudir?
Me encuentro solo, teniendo que tirar de amigos pasajeros para intentar pasar 5 minutos sin pensar en algo que me de ganas de cortarme las venas.
Eso es MUY triste.
Y nada
Y nada. Mentiras, mentiras, mentiras, y más mentiras.
Estoy rodeado de falsedad por todas partes.
miércoles, 15 de septiembre de 2010
viernes, 10 de septiembre de 2010
Nuestra historia.
You hate me. I love you.
Todo comenzó en noviembre de 2009, cuando yo llevaba apenas un mes yendo al retiro y aun no conocía a nadie. Nos conocimos por una gran casualidad... nos teníamos en el tuenti, tú me viste por allí, y me hablaste. Algo bastante inusual. Entre gilipolleces varias, me prestaste un guante, que te acababas de comprar, ya ves.
Recuerdo que ese mismo día le hablé de ti a la que por entonces era mi mejor amiga. Le hablé mucho de ti. Me preguntó "pero bueno, ¿qué pasa, que te gusta ese chaval?", y yo le dije que no, que simplemente, me había caido muy bien.
Y es verdad. Fue una conexión instantánea. Y ya ves, amigos desde entonces. Nos vimos las dos o tres siguientes veces que nos vimos por el retiro. Gracias a ti empecé a conocer a muchísima gente, gente que ahora son de mis mejores amigos. Lo que soy ahora te lo debo a ti y a tu ayuda en ese momento.
Los meses posteriores fueron quizás los más felices de toda mi vida. Por fin amigos de verdad. Me lo pasaba en grande cada día que salía. Todo era nuevo, diferente, divertido, y todo era diversión y despreocupación.
Como todos los amigos, tuvimos momentos de cierto... alejamiento. A finales de enero y hasta finales de marzo, por ejemplo. En esa época me alejé de todo el mundo en general por una sola persona. Y me arrepiento muchísimo de ello.
Pero volvimos al contacto tras eso.
Siempre intenté ayudarte con tus problemas. En esos momentos en los que nadie te entendía por lo que querías hacer o lo que te pasaba, y yo estaba allí para apoyarte, diciéndote que tenías que expresar lo que sentías siempre, que tenías derecho a ello.
Fue una época extraña. Durante cosa de mes y medio, en la que mi mejor amigo y mi mejor amiga estaban saliendo, y ambos me contabais vuestros problemas, cada uno a vuestra manera. Intenté entenderte y ayudarte siempre. Te di consejos, te dije que jamás te preocuparas de lo que la gente pudiera decir. Que si la gente te miraba mal, es que no merecía que tu le devolvieras la mirada.
Y seguí apoyándote cuando esta pequeña época acabó. Tuviste tus altibajos, tus momentos de depresión y de alegría. Pero en general, fueron unas semanas extrañas.
Las cosas parecieron estabilizarse después de feria. Te sentías solo, y yo te ofrecí un sitio donde resguardarte, en un grupo de amigos muy especiales donde estaba muy a gusto. En ese sitio no solo encontraste grandes amigos si no también una pareja que hizo que dejaras de sentirte solo.
Durante cosa de un mes y medio o dos meses era todo perfecto. Los dos con pareja, felices, y en el mismo grupo de amigos. Era todo genial.
Pero todo acaba en esta vida, y para ambos dos, las cosas acabaron en junio de este año.
Fue un mal trago que pasamos los dos juntos, como mejores amigos. Los dos lo pasamos mal, pero nos acabamos recuperando.
Tú te recuperaste antes. Y entre otras cosas, estuviste con la persona por la que yo lo pasaba mal en aquel momento.
Eso me hizo sufrir bastante.
Pero yo no me quise interponer. "Desaparecí" de todo, te puse una excusa para que no te sintieras culpable y me quité de en medio. Tú eras feliz, y eso era todo lo que yo necesitaba.
El resto del verano fue muy extraño. Seguí a tu lado en todas las ocasiones, en todos tus pequeños problemas, apoyándote, defendiéndote de todo lo que decía la gente. Oyendo mentiras y haciendo que me las creía para no ocasionar problemas ni discusiones.
Pero ya nada era lo mismo...
Tuve una mala racha este verano. Y me dio un bajón. Empecé a derrumbarme, durante unos pocos días.
Desde entonces, todo ha sido "has cambiado" "ya no eres el mismo", y reproches similares, que me hacían sentir como si ya no mereciese nada.
Y pese a todo, me esforzaba cada día por hacerte creer que yo soy el mismo de siempre, aunque alguna vez tenga bajones como todo el mundo.
Porque he sido demasiado feliz a tu lado.
Tengo muchísimos recuerdos.
Como pasarme un día entero desde las 3 de la tarde contigo y luego ir al retiro... y que fuera muchísimo más feliz estando sentado a tu lado en tu casa mientras tú escuchabas tu música, que cuando estaba en el retiro con más gente.
O ver monólogos o animes contigo, y ser feliz solo sabiendo de las miradas que me dirigías a mí de vez en cuando en lugar de a la pantalla del ordenador.
Estar viendo una película de zombis, y asustarme de los ruidos que había en la casa solo para poder acercarme un poco más a ti y sentirme "protegido"...
Pese a todos estos momentos y todos los esfuerzos, de repente, parece que se acabó. No entendí nada. Absolutamente nada. Que me he vuelto un egocéntrico, que paso de ti y de vosotros... miles de excusas que no comprendo. Excusas que veo que solo sirven porque quieres alejarte de mí. Y lo has conseguido.
Parece que todo se acabó. Y quizá ya no volvamos a tener momentos como todos los que tengo ahora en mi cabeza. Quizá ya no vuelvas a decirme que entre nosotros no hay secretos, por mucho que para ti solo fueran palabras vacías por dentro.
Quizá ya nunca recupere a mi mejor amigo.
¿Y todo porqué...?
Explícamelo. Yo aun no lo he entendido.
Y termino de escribir estas líneas que tú jamás leerás, y que si tuvieras la oportunidad de leerlas, pasarías del tema y dirías algo como "no se arregla todo con cuatro palabras bonitas". No se que es ese todo. No son solo cuatro palabras bonitas. A fin de cuentas, nunca te gustaron estos sentimentalismos.
No se que hacer ahora. Ni con mi vida, ni con esto que estoy escribiendo ahora mismo.
No lo se. No se nada.
Se acabó (?)
You hate me. There is nothing more than that.
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